¿La próxima campaña basada en un objeto de marketing directo?. ¿Cambiarías una parte de cuerpo, venderías corneas o riñones?
¿Guardarás en tu bolsillo ese lapiz impreso con una marca?
¿Destaparías la alcantarlla? ¡La encontrarías abortando en un baño!, trabajando hacinadas a 40º C, traídas desde el interior,
como un trata de blancas vagando por carreteras.
(durmiendo en una fábrica).
Destapas la CPU cambias la RAM, sonríes.
Tornillos, pasto, arpilleras sudadas,
y un guardia armado revisando los bolsos,
para entrar o salir del trabajo, hablar de un sindicato
y ser despedidas al desierto.
Con tres monedas más, con veinte kilos menos,
con menos esperanza, con mucho más odio.
